Un titulo imprescindible. En este clásico de la fenomenología de las religiones, Otto nos recuerda que lo que se predica de Dios de forma racional no es más que una analogía, importante en cuanto suscita en uno un sentimiento semejante que pertenece a una realidad que no puede ser comunicada, pero que no se refiere directamente a esa realidad. Este elemento racional es todo lo que el hombre puede predicar de sí mismo, pero elevado, por la vía de la eminencia, a un grado sumo. Por otro lado, Otto nos da una idea del elemento irracional en la idea de Dios, que es una evocación o intuición interna e inefable que los antiguos llamaron lo Santo. Otto, por ser éste un vocablo muy desgastado y hoy comúnmente trasladado a un sentido ético como lo absolutamente bueno, prefiere utilizar un neologismo: lo numinoso. Ante lo numinoso se genera en el hombre un sentimiento ambiguo: por un lado de atracción y fascinación (mysterium fascinans), y por otro de repulsión y temor (mysterium tremendum), y ambos constituyen el sentimiento de criatura, esa sensación de no ser más que tierra y cenizas como lo expresa Abraham (Génesis 18:27). Este sentimiento puede ser rastreado a lo largo de la historia de las distintas manifestaciones religiosas, y Otto nos da varios ejemplos de ello. Citado hasta la veneración, este pequeño libro ha inspirado a grandes académicos como Eliade y Panikkar. Su lectura es amena y su lenguaje comprensible, y si bien Otto, teólogo protestante, escribe dentro de una atmósfera cristiana que impregna las páginas de su obra, todo lo que expresa sobre el Dios teísta de los cristianos es válido también para el estudio de otras religiones. Una advertencia en palabras del autor: “Invito ahora al lector a que actualice en su memoria y examine un momento de fuerte conmoción, lo más exclusivamente religiosa que sea posible. Quien no logre representárselo o no experimente momentos de esa especie, debe renunciar a la lectura de este libro”.
Titulo: Lo sagrado
Autor: Rudoph Otto
Traducción: Eduardo García Belsunce
Editorial: Claridad
218 páginas