EL PECADO ORIGINAL DEL LIBERALISMO NACIONAL
Gustavo Baiman relata hechos que acontecieron durante un prolongado período de tiempo que transcurre entre la creación del Virreinato del Río de la Plata, y se extiende hasta la consolidación del Estado nacional-liberal. El punto de partida representa un conflicto entre el Virreinato del Río de la Plata y el del Perú; obviamente, las tensiones se corresponden con una cuestión económica, que importa en razón de las rutas.
También es cierto que, la institucionalidad deseada durante décadas, pudo imponerse sorteando obstáculos –no todos querían parirla de un mismo modo, ni con un mismo perfil-; los intereses personales pesaban entonces demasiado al tiempo de tomar decisiones. Así es que, durante todo ese tiempo comprendido entre un acontecimiento histórico y el otro, se sucedieron hechos y circunstancias que imprimen determinados pasajes de nuestra historia que, en principio, podrían verse como intrascendentes salvo que, como en este caso, los relatos sean objeto de una mirada política cobrando, así, una mayor importancia.
Este enfoque político que el autor propone sobre cada uno de los hechos expuestos en su libro, permite visualizar un escenario extendido; un antes y un después de la Revolución de Mayo. Aquel espíritu revolucionario fue acompañado por otros ánimos, no tan patrióticos, eran hombres con ánimos de lucro.
Una revolución contaminada. Especuladores, aventureros y trepadores sin escrúpulos, también fueron protagonistas refugiados en la política con la única intención, mezquina, de hacer sus propios negocios.
Mucho tiempo de benefactores cobrando intereses usurarios; pagos de sobornos marcando el rumbo de la historia; prácticas fraudulentas de los funcionarios; malversación de fondos de la Aduana; negociados y enriquecimiento ilícito. Contrabando y tráfico de esclavos.
Bienes saqueados. Despilfarro de las cuentas públicas. Ambiciones desmedidas. Abusos de poder.
Los beneficios de la política, los privilegios; los testaferros. Estrategias maliciosas en relación con el manejo de los asuntos públicos.
Facciones de comerciantes; una constante puja de intereses. Deslealtades y traiciones.
Los grandes negocios personales. Empresas que nunca existieron y, no obstante ello, se compran y venden sus acciones. La Baring Brothers y el millón de libras.
El precio de los elogios periodísticos.
El Tráfico de armas sin pruritos ideológicos.
Podríamos decir que este libro expone el ADN de una casta que hizo del comercio y los negocios, un poder político y, de la política, el mejor negocio que esa misma casta pudo imaginar. Así, un pecado original del Estado liberal se encontraría precisamente en la concepción de la política entendida como cuna, y refugio, de la corrupción. Este pecado original nos habría marcado a fuego.
En uno de los relatos, el autor menciona “la calle del pecado” al describir un hecho puntual y un perfil de la personalidad de Juan Larrea. Hoy cuántas de nuestras calles llevan nombres ligados a tantos pecados de nuestra historia, como una suerte de homenaje póstumo a la corrupción en estado puro.
Titulo: Los primeros ladrones de la patria
Autor: Gustavo Baiman
Editorial: Vergara
192 páginas