Un hombre puede ser honesto o ambicioso, pero no las dos cosas.
Tarde o temprano hay que elegir.
Un pianista que regresa con una mano rota a la ciudad que lo viera triunfar en el pasado, un jockey que sueña con la trascendencia, una ex prostituta perseguida por su antiguo proxeneta. Una red de chantajes. Una campaña electoral y el funambulesco mundo del arte. Un atraco fallido que termina en secuestro y la corrupción que corroe como humedad los andamiajes de toda construcción social…
Cuentas pendientes no es el primer noir en el que coinciden los talentos de Sergi Álvarez y Sagar Forniés, pero sí fue mi pasmosa puerta de entrada a la obra de ambos.
Sergí Álvarez traza una trama perfecta de fracasos cruzados que encastran el pragmatismo cínico de los poderosos con el nihilismo opaco de los vencidos. Cada uno de los personajes de este relato, lo inicia o culmina tratando de sobrellevar sus cuentas pendientes con una vida que nos la juega con baraja marcada.
El arte de Sagar, la expresividad que logra imprimir tanto en los personajes como en el ambiente, la oscuridad y el candor, la velocidad de la gran ciudad, sus suburbios y los tugurios de jazz… La música está presente en los cinéticos trazos que dibujan una melodía marcada por la desesperación y la melancolía.
Cuentas pendientes no tiene nada que envidiar a las grandes obras del género negro.
Título: Cuentas pedientes
Guión: Sergi Álvarez
Dibujo: Sagar Forniés
Editorial: Astiberri
137 páginas