“… Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver” canta el bardo español, pero como en todo, siempre hay excepciones a la regla. Nick Frost y Simon Pegg, la dupla que nos trajeron Shawn of the dead, Hot Fuzz, Spaced y Paul entre otras, vuelven a unir fuerzas para visitar una vez más el territorio en el que más felices nos hicieron a todos, la comedia de horror. En esta ocasión se trata de terror paranormal con una vuelta de tuerca tan inteligente como novedosa. The truth seekers, cuya primera temporada de 8 capítulos puede verse en la plataforma Amazon Prime narra la historia de Gus Roberts (Nick Frost), un técnico en instalación de internet WiFi, viudo y con vocación de investigador de lo oculto. Junto a su nuevo compañero, Elton John (Samson Kayo), recorren el territorio británico a pedido de Dave (Simon Pegg) su jefe de operaciones, reparando conexiones para a empresa Smyle. La pasión de Gus, que vehiculiza por un canal de YouTube (The Truth Seekers), se ve desbocada desde la llegada de Elton al equipo. Las experiencias preternaturales se suceden capítulo a capítulo en donde la realidad fantasmal se cruza con la tecnología para dibujar una gran conspiración en la que de manera directa o indirecta cada uno de los protagonistas se ven involucrados.
Astrid (Emma D´Arcy) en un papel destacado y Helen (Susan Wokoma), la hermana agorafóbica de Elton, completaran el variopinto equipo de investigadores de lo oculto.
El elenco cuenta también con la participación del titánico Malcolm McDowell (La naranja mecánica, Calígula, el doctor Loomis en las Halloween de Rob Zombie y el gurú Bret Stiles en El Mentalista), que en esta oportunidad no solo aporta su carisma, sino que saca lustre en el apartado cómico.
La serie, dirigida por Jim Field Smith y guionizada por los propios Frost y Pegg junto a Nat Saunders y James Serafinowicz logra en tan solo cuatro horas (8 capítulos de 30 minutos) un entretenimiento inteligente que promete nuevas temporadas. Ojalá así sea y puedan mantener el nivel.