Son descripciones. Arte en movimiento. Dibujos en los que lo humano acapara, en gran parte, la gama de colores. Escenas de la vida detenida en el instante justo que propone su mirada. El ojo atento de la curiosidad. Formas de ver y de impactar cuando nos cuenta, después, lo que ella ha visto. También impresiones acerca de lo oído. Son voces capturadas. Son todas huellas, que conectan con los viajes, que se suman como escamas en el pez.
Generalmente, cuando hablamos de viajar, pensamos en una forma de esparcimiento y recreación. Muchas veces decimos que viajamos para desconectarnos. En su caso, cada viaje estaría destinado a conectarse con… ¿Podemos hablar del propósito deseado?
Uno no sabe con demasiada seguridad porqué hace lo que hace. Lo que hay es un impulso inicial, un deseo, un proyecto. Los propósitos aparecen después, cuando uno debe explicar a alguien porqué hace lo que se le ocurre hacer, a mi me parece que viajo para aprender, para ventilarme y cambiar de aire y después para volver a mi casa y encontrarla más linda y nueva
¿Podría brindarnos un par de ejemplos sobre experiencias distintas, una exitosa y otra frustrante, en lo que hace al resultado esperado?
Experiencia exitosa: en mi viaje del mes anterior conocí a Teresa Epuyén, de la comunidad mapuche en Carmen de Patagones. Usa para hablar un sinnúmero de metáforas criollas que me encantaron, me gustó ella, la hubiera traído para tenerla cerca como vecina, como amiga, como lo que fuera. Y cuando nos despedimos, me dijo ¿Vas a volver?, y cuando me di vuelta, iba a tomar un ómnibus que me llevara al centro de Viedma, ella me estaba mirando, parada junto a la puerta de su casa. Me dio un poco de emoción y yo soy muy dura para llorar…
Una experiencia un poco frustrante fue mi visita a los Quilmes en Tucumán, ahora en mi último viaje, yo quería ver en qué consistía la interna que ellos tienen en su comunidad, donde se debate el manejo de las ruinas, pero no pude enterarme bien porque claro, el día que fui había asamblea y era justo lo que yo quería ver, pero no me dejaron, me mandaron dos guías de la comunidad para charlar, pero no vi la asamblea, igual los comprendo, yo vengo a ser una espía o alguien de afuera.
Un viaje, cuando se hace recuerdo, suele atesorar imágenes, emociones y otras riquezas. ¿Qué es lo que más le interesa conservar de ellos, y porqué?
Del viaje se conserva lo que se puede, no lo que se quiere, como dice Caparrós que es un gran viajero, de un lugar del interior, que en el hotel había cucarachas, » Este lugar va a quedar en mi recuerdo lamentablemente como el lugar donde había cucarachas.»
¿Qué puede decirnos del lenguaje, del estilo y de la potencia narrativa?
En la crónica sobre todo, muchas veces tengo dudas sobre cambio de ritmo, por ejemplo cuando trabajo con una ciudad o pueblo y me parece importante poner datos históricos para mayor comprensión del lugar, me parece que cambio ritmo cuando abruptamente se me ocurre poner algún detalle de vida cotidiana que no sé si pega, a lo mejor no, pero no quiero sacar algo que me dice el instinto que tiene que estar. . De todos modos, me tomo bastante trabajo para cada viaje y trato de que el que lee vea el lugar a través de la crónica, si lo logro, no sé.
Por último, ¿qué representa, para usted, el reconocimiento alcanzado y la valoración social mediante la escritura?
Como me llegó tarde, a una edad en que uno tiene otras prioridades, no me la creo, la fama es como la plusvalía del dinero, una vez que echa a andar va sola por su cuenta independientemente del valor del producto vendido. O sea que es algo que tomo con pinzas.